habilidades sociales
APRENDIENDO A DESARROLLAR NUESTRAS HABILIDADES SOCIALES
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE TRABAJAR LAS HABILIDADES SOCIALES?
Las habilidades sociales constituyen una de las áreas prioritarias en el desarrollo social de cualquier persona, su aprendizaje está condicionado por las experiencias vividas, el entorno en el que nos movemos y los modelos que nos rodean.
Para ello es imprescindible trabajar y estimular el desarrollo de habilidades como la escucha, la expresión verbal y no verbal y la comunicación en general como herramientas para fortalecer su capacidad en el manejo de las emociones, de reforzar las capacidades para definir los problemas, optar por las mejores soluciones y aplicarlas.
Las habilidades sociales nos ayudarán a alcanzar un mayor número de éxitos personales en nuestras relaciones con los demás siempre respetando los derechos de la otra parte.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE TRABAJAR LAS HABILIDADES SOCIALES?
Las habilidades sociales constituyen una de las áreas prioritarias en el desarrollo social de cualquier persona, su aprendizaje está condicionado por las experiencias vividas, el entorno en el que nos movemos y los modelos que nos rodean.
Para ello es imprescindible trabajar y estimular el desarrollo de habilidades como la escucha, la expresión verbal y no verbal y la comunicación en general como herramientas para fortalecer su capacidad en el manejo de las emociones, de reforzar las capacidades para definir los problemas, optar por las mejores soluciones y aplicarlas.
Las habilidades sociales nos ayudarán a alcanzar un mayor número de éxitos personales en nuestras relaciones con los demás siempre respetando los derechos de la otra parte.
¿CUÁLES SON LAS HABILIDADES SOCIALES NECESARIAS?
La asertividad
La ASERTIVIDAD es
una habilidad social que conlleva afirmarnos en nosotros mismo, salvaguardando
tus derechos sin atentar contra los derechos de los demás. Se trata de tener la
capacidad de comunicar nuestras creencias, sentimientos y opiniones de manera
directa y adecuada.
Asertividad es seguridad en sí mismo la asertividad, al igual que todas las habilidades, es una conducta que se aprende. Las personas no nacemos siendo asertivas, pero sí tenemos capacidad para aprender a serlo.
Asertividad es seguridad en sí mismo la asertividad, al igual que todas las habilidades, es una conducta que se aprende. Las personas no nacemos siendo asertivas, pero sí tenemos capacidad para aprender a serlo.
Ejercicio. Aprender a ser asertivo/a
Ejercicio 1
Escribe en un cuaderno:
- 5 cosas que apruebes de tu imagen física. Todos tenemos cosas bonitas. Pueden ser los ojos, el pelo, la piel, las orejas, las manos, los pies, la estatura, la sonrisa... Si tú mismo no eres capaz de encontrarlas, pregunta a un amigo o familiar.
- 5 cosas de tu forma de ser que te agraden. Puede ser tu amabilidad, tu capacidad de escucha, tu discreción, tu generosidad, tu bondad, tu simpatía, tu inteligencia, tu constancia... Si no se te ocurre nada, piensa en las cosas que valoras en los demás y reflexiona hasta qué punto tú también posees esas virtudes.
Revisa tus listas y piensa que, si conocieras a una persona con esas características, seguramente estarías encantado de haberlo conocido.
Ejercicio 2
Al final de cada día y al menos durante treinta días, escribe el final de estas frases:
“Hoy me he sentido bien conmigo mismo/a por...”
“Hoy he hecho algo bueno para mí cuando...”
“Me gusto más a mí mismo/a cuando...”
“Me empiezo a dar cuenta de que tengo la virtud de...”
“Aunque he cometido un error, me doy cuenta de que...”
Ejercicio 1
Escribe en un cuaderno:
- 5 cosas que apruebes de tu imagen física. Todos tenemos cosas bonitas. Pueden ser los ojos, el pelo, la piel, las orejas, las manos, los pies, la estatura, la sonrisa... Si tú mismo no eres capaz de encontrarlas, pregunta a un amigo o familiar.
- 5 cosas de tu forma de ser que te agraden. Puede ser tu amabilidad, tu capacidad de escucha, tu discreción, tu generosidad, tu bondad, tu simpatía, tu inteligencia, tu constancia... Si no se te ocurre nada, piensa en las cosas que valoras en los demás y reflexiona hasta qué punto tú también posees esas virtudes.
Revisa tus listas y piensa que, si conocieras a una persona con esas características, seguramente estarías encantado de haberlo conocido.
Ejercicio 2
Al final de cada día y al menos durante treinta días, escribe el final de estas frases:
“Hoy me he sentido bien conmigo mismo/a por...”
“Hoy he hecho algo bueno para mí cuando...”
“Me gusto más a mí mismo/a cuando...”
“Me empiezo a dar cuenta de que tengo la virtud de...”
“Aunque he cometido un error, me doy cuenta de que...”
la toma de decisiones
Las personas continuamente estamos tomando decisiones. Esto nos ofrece la posibilidad de tener el control sobre nuestras vidas, lo que también nos obliga a ser responsable de nuestros actos.
En ocasiones tomar decisiones no resulta fácil. Dudamos sobre cuál puede ser la opción más adecuada y esto puede producirnos angustia. En un momento dado tomar una decisión incorrecta nos puede alejar del objetivo que pretendíamos alcanzar.
Y tú... ¿cómo tomas las decisiones?
- Me dejo llevar por los demás. Dejo que otros decidan por mí.
- Retraso mi decisión lo más que puedo.
- Soy una persona impulsiva. Hago lo primero que me pasa por la cabeza.
- Pienso que nada está en mis manos: la suerte o el destino decidirán por mí.
- Estudio las ventajas y desventajas que las diferentes opciones.
- Me gusta tener información para poder decidir. Busco información.
- Me dejo aconsejar. Siempre es bueno escuchar a otras personas y ampliar opciones.
- Decido sin consultar a nadie. Siempre tengo clara la opción.
- Intento pensar en los sentimientos y en la situación de las personas a quién pudiera afectar mi decisión.
- Reflexiono en primer lugar sobre lo que yo quiero y siento.
En ocasiones tomar decisiones no resulta fácil. Dudamos sobre cuál puede ser la opción más adecuada y esto puede producirnos angustia. En un momento dado tomar una decisión incorrecta nos puede alejar del objetivo que pretendíamos alcanzar.
Y tú... ¿cómo tomas las decisiones?
- Me dejo llevar por los demás. Dejo que otros decidan por mí.
- Retraso mi decisión lo más que puedo.
- Soy una persona impulsiva. Hago lo primero que me pasa por la cabeza.
- Pienso que nada está en mis manos: la suerte o el destino decidirán por mí.
- Estudio las ventajas y desventajas que las diferentes opciones.
- Me gusta tener información para poder decidir. Busco información.
- Me dejo aconsejar. Siempre es bueno escuchar a otras personas y ampliar opciones.
- Decido sin consultar a nadie. Siempre tengo clara la opción.
- Intento pensar en los sentimientos y en la situación de las personas a quién pudiera afectar mi decisión.
- Reflexiono en primer lugar sobre lo que yo quiero y siento.
Qué no se debe hacer
Ejercicio 1 ¿Cómo tomas las decisiones?
A) En un papel escribe ideas sobre las formas en que las personas toman las decisiones:
1.- dejando que otro tome la decisión por él
2.- evaluando todas las opciones posibles,
3.- de forma impulsiva,...
B) Ahora reflexiona sobre los riesgos, ventajas, desventajas y posibles consecuencias de cada una de las formas señaladas:
A) En un papel escribe ideas sobre las formas en que las personas toman las decisiones:
1.- dejando que otro tome la decisión por él
2.- evaluando todas las opciones posibles,
3.- de forma impulsiva,...
B) Ahora reflexiona sobre los riesgos, ventajas, desventajas y posibles consecuencias de cada una de las formas señaladas:
LA EMPATÍA
Uno de los elementos clave que forma la inteligencia emocional, es la empatía, la cual pertenece al dominio interpersonal.
Pero, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de empatía? La empatía no es otra cosa que “la habilidad para estar conscientes de, reconocer, comprender y apreciar los sentimientos de los demás". En otras palabras, el ser empáticos es el ser capaces de “leer” emocionalmente a las personas.
Pero, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de empatía? La empatía no es otra cosa que “la habilidad para estar conscientes de, reconocer, comprender y apreciar los sentimientos de los demás". En otras palabras, el ser empáticos es el ser capaces de “leer” emocionalmente a las personas.
ACTIVIDAD
1. Te Propongo que elijas a una persona con la que no te suelas comunicar o a la que no sueles prestar atención cuando habla en clase, en casa, o en el ambiente que prefieras.
2. Una vez la hayas elegido, deberás vestirte y actuar como ella para que seas capaz de sentirte como esa persona (por ejemplo si eliges a tu madre coge alguna de su ropa y calzado, con su permiso, y pontela).
3. A continuación actúa como esa persona, haz lo que él/ella haría, realiza tareas como las haría esa persona e incluso intenta hablar como la persona a la que has elegido.
4. Tras unas horas actuando como esa persona, vuelve de nuevo “a tus zapatos” y ahora reflexiona… cómo te has sentido siendo esa persona, te ha gustado ser esa persona, te has imaginado como se debe sentir esa persona ante situaciones como las que has vivido siendo como ella.
El objetivo de esta actividad es que seas capaz de entender a esas personas con las que no te comunicas de forma empática y como se sienten ellas.
“La empatía es la capacidad de pensar y sentir la vida interior de otra persona como si fuera la propia” (Heinz Kohut)
LA ESCUCHA ACTIVA
RECORDAD: Para iniciar y mantener una conversación no es necesario decir algo maravilloso e interesante, lo más importante es MANTENER UNA ACTITUD DE RESPETO HACIA LOS/LAS DEMÁS.